Cómo influye la alimentación en el estado de ánimo

¿Alguna vez te has fijado en cuánto llega a influir tu alimentación en el día a día, en el trabajo, las relaciones sociales y tu estado de ánimo?

Hay momentos en los que, en temporadas complicadas, nos da por comer alimentos procesados y con mucha grasa. Aparentemente, pensamos que esto nos ayuda a despejar nuestra mente y llenar esas carencias emocionales que tanto nos preocupan. Pero en Derbós ¡vamos a demostrarte que comer sano te hará sentirte mucho mejor!

Miles de expertos afirman que la buena alimentación es esencial para aumentar la secreción de algunos neurotransmisores, que afectan en el placer y el bienestar de las personas, incrementando su energía y motivación para el día a día. 

Nutrientes que interviene en neurotransmisores

Algunos de los nutrientes que intervienen en dichos neurotransmisores pueden ser el Triptófano, la Colina o la Vitamina C, entre muchos otros. Esta última, por ejemplo, ayuda a disminuir el cansancio y la fatiga. A esto se le suma la cantidad de calorías que ingerimos y quemamos en un mismo día.

Cuando una persona se alimenta de forma saludable y no toma más calorías que las recomendadas por los expertos acorde a su organismo, se siente bien y generalmente adquiere un estado de ánimo positivo. Si además lo compaginas con una rutina de ejercicio físico ¡no podrás sentirte mejor!

Los niveles de las endorfinas también pueden aumentar con el deporte, por eso es tan recomendable combinar una dieta saludable con mantenernos activos cada día.

Además de incrementar la salud física, también lo haréis con la mental, y ambas son igual de fundamentales para sentirnos bien. 

No os penséis que siguiendo una alimentación equilibrada vuestros días se convertirán en maravillosos de la noche a la mañana, pero sí que ayudarán a intensificar la estabilidad emocional y a sentiros ligeros durante toda la jornada.

Alimentos negativos que influyen en el estado de ánimo

Así como algunos nutrientes pueden desarrollar el buen humor, también hay algunos alimentos que adquieren el efecto contrario, provocando que tengamos emociones negativas y mal genio, por lo que es mejor evitarlos o por lo menos, ingerirlos lo menos posible. Por ejemplo:

Azúcares refinados. Consumirlo en gran medida puede afectar a los niveles de azúcar en la sangre e incluso cambiar nuestro estado de ánimo. A su vez, ocurren muchos cambios químicos en el cuerpo que conducen a una inflamación crónica y, con el tiempo, a cambios en el sistema inmunitario.

  • Azúcares refinados. Consumirlo en gran medida puede afectar a los niveles de azúcar en la sangre e incluso cambiar nuestro estado de ánimo. A su vez, ocurren muchos cambios químicos en el cuerpo que conducen a una inflamación crónica y, con el tiempo, a cambios en el sistema inmunitario.
  • Grasas transgénicas. Hay alimentos procesados, comida basura, bollería industrial, patatas fritas… que su consumo está relacionado con problemas de depresión, días malos, temporadas de bajón, etc.

Cómo influye la alimentación en el estado de ánimo

Comer cantidades adecuadas

Uno de los factores a tener en cuenta y que no debemos pasar por alto es comer sano, pero siempre contando con la cantidad adecuada, ya que muchos asocian esta práctica con ingerir menos y esto es un error que puede derivarnos a perder toda la energía que estamos buscando. ¡Y no es lo que queremos!

La clave está en encontrar el equilibrio y comer sano tanto en calidad como en cantidad. 

Otro de los consejos que os damos es que disfrutéis de vuestra alimentación. Dejad el móvil, apagad la televisión y comer con tranquilidad, masticando lentamente y centrando toda la atención en comer. De esta manera, ayudaréis a vuestro cuerpo a hacer una mejor digestión y evitaréis la pesadez y los hinchazones, pero también desconectaréis de las pantallas, que es muy necesario. ¡Disfrutad de estos ratitos!

¡Empieza a cuidarte por fuera y por dentro!