Son tiempos difíciles. Cada minuto llega una noticia relacionada con la pandemia. Algunas son desesperanzadoras, otras más optimistas. Sea como sea, lo importante es ver siempre el vaso medio lleno, porque de ésta, vamos a salir más fortalecidos.
En este tipo de situaciones, sacamos realmente lo que llevamos dentro para hacer frente a momentos delicados: nobleza, fortaleza, debilidad, mezquindad. Y también es, durante estos días, cuando valoramos lo que realmente importa: un abrazo, un beso, una caricia… Afortunadamente, también hemos aprendido a besar y a acariciar a nuestros seres queridos de forma que jamás hubiéramos imaginado. Ahora una sonrisa, un gesto o una mirada (por encima de la mascarilla), y a través de una pantalla, dicen lo mismo, o incluso más, que ese contacto físico que el virus no nos permite.
Son esos pequeños detalles de miles de personas los que nos van a ayudar a vencer al COVID-19. Detalles responsables y necesarios en momentos, en los que muchas personas ya han muerto, y otras penden de un hilo. Frente a este tipo de situaciones, ¿qué hacer? ¿derrumbarse? NUNCA. Desde Derbós, el vaso siempre medio lleno. No dejemos de reír, de disfrutar. No dejemos de sentir y de luchar. No dejemos nunca de bailar o de soñar. La cabeza siempre alta, y mirando el presente y el futuro con OPTIMISMO, aunque a veces cueste.
Juntos lo vamos a conseguir, y más pronto de lo que pensamos, volveremos a abrazarnos y besarnos, volveremos a salir con los amigos, a ver a nuestros seres queridos. Pero mientras tanto, hay que luchar contra la pandemia, y la mejor forma de hacerlo es a través de la responsabilidad y de la tranquilidad, ayudando y apoyando así, a nuestros propios héroes y heroínas: sanitarios, cuerpos de seguridad, limpiadores, cajeros, reponedores, farmacéuticos, trabajadores del sector primario o de la industria.
Y ¿cómo les podemos ayudar? ¿cuál es nuestro granito de arena para la lucha? Es muy fácil. #YOMEQUEDOENCASA. Y para haceros la estancia más amena, os traemos una serie de pequeñas acciones que ahora podemos disfrutar haciendo en nuestro hogar. ¿Puede haber un sitio mejor dónde estar ahora?
1. LEER. No hay mayor placer que, cuando se tiene tiempo (y ahora lo tenemos), sentarse y disfrutar de un buen libro. No importa tanto el contenido, sino la predisposición a hacerlo. Es una buena ocasión para comenzar nuevas aventuras y volar a mundos desconocidos, ¿no os parece?
2. MEDITAR. Cuántas veces, durante estos últimos meses hemos pensado: “Cómo me gustaría parar un poco mi actividad diaria y poder pensar en mi situación: quién soy, dónde estoy, hacia dónde quiero ir”. Ahora podemos. No lo desperdiciemos. Además, si no estáis inspirad@s, hay infinidad de tutoriales de iniciación a la meditación en internet (https://www.youtube.com/watch?v=-GslW0vDsCY).
3. ORDENAR. Ahora es el momento para abrir todos esos armarios de casa y hacer una limpieza a fondo. Seguro que más de una se lleva una grata sorpresa al encontrar objetos que imaginábamos perdidos… Además, nos servirá para deshaceros de aquello que no utilizamos y que ya no vamos a utilizar jamás.
4. COCINAR. Seguro que tenéis un libro de recetas lleno de polvo que se va a sorprender de que lo utilicéis. Sacad vuestro talento gastronómico oculto. Seguro que sale algo rico de vuestra imaginación. ¿Quizás tú seas el próximo Masterchef y aún no lo sabes?