En el post de la semana pasada “Este verano practica deporte sin riesgos innecesarios” te contábamos cómo hacer deporte en verano evitando riesgos para nuestra salud. Hoy, queremos que mejores tu salud con uno de nuestros deportes fetiche: LA NATACIÓN.
La natación es uno de los deportes más adecuados si lo que buscas es mantener un peso saludable. En general, con la natación podemos quemar entre 500 y 600 calorías en una hora. No está mal, ¿verdad?
Además, esta actividad física, muy apetecible en verano, tiene numerosos beneficios para nuestra salud a largo plazo. Uno de ellos es, que al contrario de deportes de alta intensidad como el tenis, el running o el pádel, la natación cuida mucho de nuestras articulaciones, ya que cuando la practicas, tus articulaciones no sufren, todo lo contrario, se refuerzan y se mantienen muy saludables.
Estamos seguros de que alguna vez has sentido esa sensación de bienestar que produce un buen chapuzón. Y es que, cuando nadamos, se liberan endorfinas en el celebro que controlan el estrés, la ansiedad y el estado de ánimo. Así que, si te sientes algo decaído, desmotivado y un poco estresado, una buena idea sería empezar a practicar natación. Pruébalo. Con la primera zambullida, todos tus problemas van a desaparecer.
Otro de los beneficios de este deporte, es el aumento de flexibilidad y elasticidad de tus músculos al practicarlo. Además, si sufres de piernas cansadas y mala circulación, la natación te aliviará la pesadez de las piernas y activará la circulación. De esta forma, sentirás tus piernas descongestionadas y ligeras, ¡y muy fresquitas!
Y es que, la natación no para de sorprendernos: tiene un efecto antiaging, que te ayudará a sentirte más joven durante más tiempo, evitando que los problemas de movilidad, flexibilidad y de huesos se manifiesten antes de tiempo.
Nosotros ya hace muchos años que practicamos natación con regularidad. Y tú, ¿te animas? Y es que este deporte te aportará grandes beneficios, y podrás disfrutar más tiempo de una vida activa y llena de emociones. Eso sí, la natación no solo es para el verano, porque te cuida durante todo el año.