Por fin has decidido comenzar a cuidarte, y es que el verano ya está a la vuelta de la esquina y si no lo hacemos, el bañador no nos entrará este año. Así que vas al supermercado para cambiar tus hábitos alimenticios y adquirir productos verdaderamente saludables que te hagan sentirte bien por dentro y por fuera.
Pasas por los pasillos llenos de tentaciones que muchas veces no podemos evitar, y vamos llenando nuestro carrito de lo que aparentemente parece comida sana para una dieta equilibrada. Pero, ¿realmente, todo lo que has comprado es bueno para tu salud?
Hoy en Derbós, Laboratorio Natural, te ayudamos a comprar de forma inteligente para que cada vez que salgas del supermercado te sientas muy orgulloso de saber comprar bien.
Lo primero es revisar la alacena y apuntar lo que realmente necesitas. Si te preparas un menú semanal, te será mucho más fácil detectar todo aquello que tienes que comprar y en su cantidad justa.
Eso sí, cuidado con las tentaciones que los supermercados ponen a nuestro alcance en esos infinitos pasillo repletos de cosas deliciosas que nos pueden endulzar la vida a corto plazo, pero que a la larga, puede resultar perjudicial para nuestra salud.
Consejo Derbós: nunca vayas a comprar al supermercado con hambre… porque esa sensación de estómago vacío es muy traicionero y nos hace comprar lo primero que veamos, que no suele ser muy saludable.
Revisa minuciosamente las etiquetas de los productos que vayas a comprar, para saber qué valores nutricionales tienen y poder elegir así los más saludables.
Cuando ya tengas el carro lleno, una forma rápida de comprobar que tu compra es la adecuada para una dieta equilibrada, es asegurándote de que las frutas y las verduras ocupan un 50% de la cesta de la compra.
Desde Derbós, Laboratorio Natual te damos estas pautas que a nosotros nos van muy bien para comprar de una forma equilibrada y seguir disfrutando de la comida como toca. Sigue nuestros consejos y verás qué fácil te resulta ir al supermercado a partir de ahora.
